El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) denunció que está maniatado para atender todas las denuncias que llegan a los escritorios de sus oficinas.
La falta de personal, y una deuda de ¢58.000 millones que tiene el Ministerio de Hacienda con esta institución, son dos de las principales trabas para atender las quejas, según indicó la gerente técnica, Ana María Rojas.
En un informe de la Contraloría General de la República (CGR), los hallazgos más importantes se refieren a que la atención de denuncias no es suficiente ni oportuna. En promoción de derechos, hay debilidades.
Las direcciones regionales Huetar Atlántica y Cartago son las que tienen más casos pendientes de resolver.
Según el Programa Estado de la Nación (PEN), unos 481.764 menores de edad enfrentan dificultades para atender sus necesidades básicas, lo cual también representa una violación a sus derechos.
“Somos conscientes de la importancia y prioridad de programas de protección a la madre y al menor, por lo que en el presupuesto del 2014 incorporamos más recursos para el PANI, con respecto al 2013”, dijo el ministro de Hacienda a.í. , José Luis Araya.
La CGR también critica que las acciones realizadas en materia de promoción de los derechos de las personas menores y en materia de prevención no han sido suficientes para alcanzar los fines establecidos en la normativa.
La incidencia de pobreza en niños menores de 12 años alcanza en Costa Rica un 35%.
“El entorno y la realidad que viven muchas familias los hace más vulnerables a ciertas situaciones de violencia. La agresión es un problema más evidente que va en aumento, pero que no se puede generalizar”, explicó la psicóloga de la Gerencia Técnica del PANI, Elizabeth Ballestero.