Paraíso. El santuario de la Virgen de Ujarrás, en este cantón cartaginés, se llenó de fieles anoche para recibir a la devota de Juan Pablo II.
Floribeth Mora, la mujer del milagro, llegó con su familia para visitar, una vez más, la reliquia que guarda una gota de sangre de Karol Wojtyla, el Papa que está cerca de ser proclamado santo.
Con el rostro tenso y emocionado, la mujer solo atinó a musitar una oración, y pasar su mano sobre el vidrio.
Mora, de 50 años y vecina de La Unión, fue sanada de una grave enfermedad, por intercesión del papa Juan Pablo II, según lo dio a conocer el 5 de julio la Comisión para la Causa de los Santos del Vaticano.
Ella llegó a la misa de acción de gracias celebrada en su nombre, acompañada de su esposo, Edwin Arce, sus hijos y su suegra, Rafaela Arce Abarca. Con ellos también estuvo el médico que la trató, el neurocirujano Alejandro Vargas.
Mora dijo sentirse muy conmovida por estar cerca de la reliquia de quien intercedió en su sanación.
“Estoy emocionada, mi corazón se estremeció al volver a verlo en su sangre, es como si estuviera frente a él”, dijo con lágrimas.
Esta fue la primera vez que Mora, llegó al templo, con la certeza de que el milagro recibido hará santo a Juan Pablo II.
Con ella también estuvieron muchos fieles católicos que celebraron el milagro.
La eucarístía fue celebrada a las por el párroco de la comunidad, Dónald Solano, quien recordó el proceso de la milagrosa sanación de esta mujer.
Además, el cura resaltó y agradeció a Dios que este milagro se produjera en un país tan pequeño en geografía, pero grande en la fe.
Durante todo el sábado, los miembros de los grupos parroquiales trabajaron en los preparativos de la misa.
En la plazoleta del templo, varias mujeres alistaron la comida; además, el coro Jerusalén ensayó los cantos durante horas.
Muchos de los visitantes aprovecharon para adquirir en la tienda del templo fotos, reliquias, estampas, y rosarios alusivos al Papa.
La vecina de Tres Ríos estará en la ceremonia de beatificación del Pontífice, la cual se realizará en el Vaticano; sin embargo, aún no se tiene certeza de la fecha en la que se celebrará el acto.
Mora llevará a Roma una de las reliquias de Juan Pablo II.