Diputados cubren puestos vacantes en Junta Directiva del Banco Central

Los diputados completaron, la tarde de este miércoles, la Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica (BCCR), que tenía dos de sus siete puestos vacantes, desde hace más de dos años.

En sesión extraordinaria, exclusivamente para ratificar esos dos cargos, los legisladores avalaron que las economistas Ana Victoria Hernández y Silvia Charpentier se integren a ese órgano colegiado.

Hernández recibió los votos positivos de 35 legisladores, mientras que 14 congresistas votaron en su contra, durante la mañana.

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A pesar de que su nombre fue propuesto por el Consejo de Gobierno para ser directiva del BCCR, varios congresistas del Partido Acción Ciudadana (PAC) se unieron al Frente Amplio para votar en contra de Hernández.

Según Edgardo Araya, jefe de la fracción frenteamplista, rechazaron el nombre por provenir de la misma escuela económica neoliberal, a su gusto, que impide las discusiones de fondo sobre el modelo económico.

"Si este nombramiento se ratifica (dijo antes de la votación), las discusiones de modelo económico no se darán, solo discusiones por la forma. El BCCR no debe utilizarse solo para restringir la inflación, también se debe promover la igualdad y la democracia económica, así como el desarrollo", dijo Araya.

Regaño a Ottón Solís. En el caso de Charpentier, un pequeño choque entre Ottón Solís, del PAC, y el presidente del Congreso, Antonio Álvarez Desanti, dio al traste con la intención de agilizar la votación de su ratificación.

Aunque Solís empezó a hablar sobre las calidades de Charpentier para el cargo en el Central, incluyó consideraciones sobre las iniciativas sobre empleo público y si se afectarían o no los empleados, además de las posiciones ideológicas del Frente Amplio sobre esos proyectos.

De pronto, Álvarez llamó al orden a Solís y, luego, le apagó el micrófono (tal como se lo permite el inciso 11 del artículo 27 del Reglamento de la Asamblea Legislativa), pero el oficialista siguió sus reclamos.

Esa situación molestó al Frente Amplio, pues consideró que el liberacionista que preside el Directorio se extralimitó en sus potestades.

En consecuencia, los frenteamplistas que se habían allanado al acuerdo para no hacer uso de la palabra (cada legislador puede hablar durante 30 minutos cuando se debaten nombramientos o ratificaciones), se apuntaron en la lista y obligaron, con participación de otros como Otto Guevara, Óscar López e incluso Olivier Jiménez, del PLN, a que la elección se hiciera a la 1:05 p. m.

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Finalmente, a Charpentier se le ratificó como directora con los votos afirmativos de 26 congresistas, mientras que 15 votaron en contra.

Nuevamente, entre esos 15 hubo frenteamplistas y miembros del PAC. Particularmente, los que votaron en contra de la ratificación de Charpentier fueron Henry Mora, Emilia Molina, Marco Vinicio Redondo, Nidia Jiménez y Javier Cambronero.