Para los diputados de la Asamblea Legislativa no es ninguna sorpresa la renuncia de Melvin Jiménez como ministro de la Presidencia, anunciada hoy por el presidente Luis Guillermo Solís.
De hecho, los legisladores aplaudieron la decisión de remover de su cargo al jerarca y, de una vez, le pidieron al Gobierno que nombre un ministro de la Presidencia con más capacidad de diálogo, negociación y liderazgo que el demostrado por Jiménez.
Además, para los jefes de la mayoría de las fracciones la salida del ministro no solo era inminente sino que también necesaria.
"Al PLN no le sorprende esa remoción. Se lo dijimos en persona al presidente en presencia del ministro Jiménez, que no lo aceptábamos como interlocutor", dijo Juan Luis Jiménez, jefe de la fracción del Partido Liberación Nacional (PLN).
El verdiblanco añadió que el desgaste del jerarca de la Presidencia era tan grande que no le quedaba otra opción al mandatario que quitarlo. "Ese desgaste es parte de la falta de liderazgo que le corresponde al ministro", añadió.
Gerardo Vargas Varela, jefe de la fracción del Frente Amplio, aseveró que todos los sectores representados en la Asamblea Legisaltiva esperaban la destitución de Jiménez.
"Creo que Melvin Jiménez era muy bueno en muchas cosas, pero su fuerte no era la coordinación con los legisladores", añadió.
El libertario Otto Guevara apuntó que Solís se tardó demasiado tiempo en definir la salida del ministro de la Presidencia, a quien -cree- se le habían cerrado todos los espacios.
El jefe de Restauración Nacional, Fabricio Alvarado, calificó la decisión de remover a Jiménez como "sana y prudente".
"Sus múltiples falencias en el cargo le hacían mucho daño al Gobierno y al país. (...) Las relaciones entre Gobierno y Asamblea están agrietadas y es necesario recuperarlas", aseveró Alvarado.
Abelino Esquivel, jjefe de Renovación Costarricense, afirmó que la renuncia se dio en el escenario en que se debía dar, o sea como un anuncio del presidente Luis Guillermo Solís y no de alguien más.
"La presión hacia el presidente y hacia Melvin Jiménez fue grandísima, no aguantaron. En buena hora si están pensando en poner a una buena persona en el cargo", dijo.
El diputado de la Unidad Social Cristiana (PUSC) Luis Vásquez comentó que al ministro Jiménez le hacía falta liderazgo incluso entre los demás ministros de Gobierno y añadió que no todos los diputados pensaban que hacía mal su trabajo.
"Mucha gente no le hacía caso", explicó Vásquez, primer secretario del Directorio legislativo.
Más liderazgo.
Los jefes legislativos aprovecharon para perfilar al nuevo jerarca de la Presidencia, en quien ven necesario un fuerte liderazgo, capacidad de comunicación y de negociación.
El frenteamplista Vargas dijo que el nuevo ministro debe construir una agenda gubernamental clara y estar en reunión permente con los nueve partidos representados en el Congreso.
Juan Luis Jiménez consideró que los requisitos del nuevo funcionario los debe definir Luis Guillermo Solís, a su gusto y confianza.
"(Se requiere) un hombre con la capacidad meridiana para sacar la tarea adelante. Como dijo el expresidente José María Figueres, 'se necesita resetear al Gobierno' y lo tiene que hacer el presidente con todo el gabinete", dijo el verdiblanco.
Mientras que el socialcristiano Vásquez pide un jerarca más comunicativo y que se haga sentir, el libertario Guevara ve urgente una especie de gerente del gabinete, con capacidad de correr a apagar incendios de inmediato y ponerle el pecho a las balas.