Washington. AFP. El presidente Barack Obama confirmó ayer la muerte del rehén estadounidense Peter Kassig, también conocido como Abdul Rahman Kassig, y consideró el crimen perpetrado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) un acto de “pura maldad”.
“Abdul Rahman nos ha sido arrebatado en un acto de pura maldad por un grupo terrorista que el mundo entero considera, con mucha razón, inhumano”, dijo Obama en un comunicado a bordo del avión presidencial Air Force One, durante su vuelo de regreso a Estados Unidos de una gira asiática.
“Hoy presentamos nuestro pésame y nuestras plegarias a los padres y a la familia de Abdul Rahman Kassig, también conocido como Peter”, escribió Obama.
“Mientras el grupo Estado Islámico mata a inocentes, incluidos musulmanes, siembra la muerte y la destrucción, Abdul Rahman era un trabajador humanitario que laboraba para salvar las vidas de sirios heridos y desamparados por el conflicto en Siria”, añade el texto.
Las acciones de esta organización “no representan ninguna fe, y sin duda no representan la fe musulmana que Abdul Rahman había adoptado”, agregó el presidente en referencia a la conversión al islam del estadounidense ejecutado.
Por los militares. El grupo ultrarradical reivindicó la ejecución mediante decapitación del trabajador humanitario, secuestrado el 1.° de octubre de 2013 en Siria, en respuesta al envío de consejeros militares de EE. UU. a Irak , según un video de Internet.
Kassig, de 26 años y originario de Indiana (Estados Unidos), fue secuestrado en la provincia siria de Deir Ezzor cuando ayudaba en hospitales a sirios que huían a Turquía y Líbano. Tras su captura se convirtió al islam.
En las imágenes se ve a un hombre encapuchado y vestido de negro, con acento británico, de pie junto a una cabeza cortada: “Es Peter Edward Kassig, un ciudadano estadounidense de vuestro país”, afirma este hombre.
En la misma grabación se muestra a combatientes del EI decapitando de forma simultánea a 18 hombres presentados como soldados del ejército del presidente sirio, Bashar al-Asad.
Kassig es el tercer rehén estadounidense cuya ejecución reivindica el EI, después de los periodistas James Foley y Steven Sotloff.
“Como James Foley y Steven Sotloff antes que él, su vida y obra están en completo contraste con todo lo que representa el EI”, agregó Obama.
El presidente destacó el trabajo de Kassig y expresó su confianza en que “el indomable espíritu de bondad y perseverancia que ardía de manera tan brillante en él, y que une a la humanidad; es la luz que prevalecerá por encima de la oscuridad del EI”.