“No podemos escatimar esfuerzos para convertir la actual calma en un alto el fuego definitivo en Gaza”, expresó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en una reunión informal de la Asamblea General, en la que aseguró que la “pesadilla” de las últimas cuatro semanas demuestra que la única vía posible es a través del diálogo.
Instó así a las partes a respetar la tregua después de insistir en que la propuesta de reanudar las negociaciones en El Cairo es “la única vía posible” para poder cambiar el “trágico e insostenible statu quo ” en el que se halla a región.
“La violencia debe llegar a su fin. ¿Tenemos que seguir así? Destrucción, reconstrucción y destrucción (...). Vamos a reconstruir nuevamente (Gaza), pero esta vez tiene que ser la última”, dijo Ban.
Sin embargo, esta exhortación tropezó ayer mismo con la realidad impuesta por los contendientes.
Israel indicó ayer que está anuente a prolongar, sin condiciones y sin límite, el alto el fuego de 72 horas instaurado en la franja de Gaza desde el martes. Así lo reveló una fuente israelí, que habló con la condición de no ser identificada.
Pero el subdirector de Hamás, Musá Abú Marzuk, que participa en las negociaciones con Israel en El Cairo, aseveró que “no hay un acuerdo con Israel sobre una prolongación del cese del fuego”.