El jefe de Gobierno tuvo que desautorizar públicamente el martes a su ministro de la Vivienda, Uri Ariel, quien anunció, “sin coordinación previa”, un proyecto para construir 20.000 casas en las colonias de Cisjordania ocupada, una cifra récord.
El anuncio del ministro, un dirigente del partido de extrema derecha Hogar Judío, fue duramente criticado por EE. UU., que considera “ilegítima” la colonización. Los palestinos amenazaron por su parte con abandonar las negociaciones de paz con Israel.
Israel anula proyecto en Cisjordania
La ONU también expresó su “creciente preocupación” por la aceleración de la colonización, la cual, puntualizó el coordinador especial de la organización para el proceso de paz en Oriente Medio, Robert Serry, “no corresponde al objetivo de una solución negociada con dos Estados”.
Mientras, las críticas políticas en Israel son sobre todo contra el momento del anuncio y no contra la colonización en sí. El ministro de Asuntos Estratégicos, Yuval Steinitz, cercano a Netanyahu, pidió ayer que la colonización sea “inteligente y coordinada”.
Netanyahu está en plena batalla diplomática con el secretario de Estado norteamericano John Kerry sobre el polémico programa nuclear iraní , al que acusa de querer conseguir a cualquier precio “un mal acuerdo” con Teherán, a pesar de que los estadounidenses prometen que nunca dejarán que Irán construya una bomba atómica.
Israel está intentado además usar su influencia en el Congreso de EE. UU. para presionar a la administración de Obama antes de que se retomen las negociaciones con Teherán, el 20 de noviembre.