ISLAMABAD. AFP. La tensión crecía ayer en la capital de Pakistán debido a la amenaza del opositor Imran Khan de marchar con sus partidarios hacia la zona roja, sede del Gobierno, para intentar sacar al primer ministro Nawaz Sharif.
Khan, jefe del Partido de la Justicia (PTI), multiplica las acciones desde hace una semana para desestabilizar al poder.
Ayer, tras reunirse con su aliado Tahir Ul Qadri, Khan acusó al Gobierno de fraude electoral e instó a sus seguidores a la “desobediencia civil” y a dejar de pagar impuestos y las facturas de luz.
Asimismo, anunció la dimisión en bloque de sus diputados en el Parlamento y propuso una marcha hacia la zona roja de Islamabad.
El PTI es la tercera formación del Parlamento nacional pakistaní, y también tiene escaños en las asambleas de los estados de Punjab, Baluchistán y Sindh.
Todos esas bancas serán abandonadas por los diputados, informó el vicepresidente del PTI, Shah Mehmood Qreshi.
Khan y Tahir ul Qadri reclaman la dimisión del primer ministro Sharif, cuya legitimidad ponen en tela de juicio.
La zona roja, hacia donde se dirigió la marcha opositora, es un sector ultraprotegido por policías y paramilitares, que alberga el Parlamento, la residencia del primer ministro, y las grandes embajadas, entre ellas las de Estados Unidos, Reino Unido y Francia.
Ante las amenazas de los opositores, el Gobierno anunció que iba a transferir el control del barrio, a cargo de la Policía, al Ejército.
Mientras, Khan dijo que traspasaría el perímetro de la zona roja.
Miles de personas convocadas por Khan y Ul Qadri ya se manifestaron por las calles de Islamabad el domingo para pedir la dimisión del primer ministro. Los opositores acusan al Gobierno de haber llegado al poder en el 2013 mediante fraudes masivos en las elecciones, pese a que estas fueron validadas por observadores internacionales.
Por su parte, ayer el poderoso Ejército pakistaní instó al “diálogo” para resolver la crisis entre el gobierno del primer ministro, Nawaz Sharif, y los opositores Imran Khan y Tahir ul Qadri.
“La situación necesita paciencia, prudencia y sagacidad de todas las partes para poner fin al actual callejón sin salida, a través de un diálogo y en interés de la nación”, declaró la vocería del Ejército en su cuenta de Twitter.