Atoyac de Álvarez.
Los fallecidos por los dos fuertes ciclones que han azotado al territorio mexicano ascendieron este jueves a 97, mientras los equipos de rescate afrontan la peligrosa búsqueda de decenas de desaparecidos por un gran alud en el sur del país.
"En este momento (son) 97 decesos por estos dos fenómenos naturales", Manuel e Ingrid, y 58 desaparecidos en el gran alud, dijo Luis Felipe Puente, coordinador nacional de Protección Civil del gobierno, a la televisora Foro TV.
Gran parte de México está afectado desde el fin de semana por el inusual impacto desde ambas costas de los dos ciclones, que han causado también más de 200.000 damnificados.
Los diluvios provocaron severas inundaciones y deslaves de tierra que mantienen a numerosas zonas casi incomunicadas como el balneario Acapulco, donde crece la desesperación entre miles de turistas que aún no han podido salir.
Manuel sigue activo y la mañana de este jueves golpeó la costa noroeste de México como huracán de categoría 1 -de las 5 de la escala Saffir-Simpson- aunque poco después se debilitó a tormenta tropical.
En el estado de Guerrero (sur), el más afectado por las lluvias torrenciales, las autoridades intentan trabajar en el rescate de víctimas del devastador deslave de un cerro sobre la aislada y montañosa comunidad de La Pintada, que según el gobierno mexicano dejó 58 desaparecidos mientras la alcaldía asegura que al menos causó 15 muertos.
Los sinuosos caminos colapsados por la lluvia y con riesgos de deslaves están dificultando el acceso por tierra de los equipos de rescate a La Pintada, ubicado en una zona montañosa del municipio de Atoyac de Álvarez.
Por la mañana, el secretario (ministro) de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, reconoció que los rescatistas no han podido empezar a buscar entre los restos del alud por el riesgo de sufrir nuevas avalanchas.
El ministro, que el miércoles sobrevoló la zona en helicóptero, explicó que gran parte de esta pintoresca comunidad cafetera quedó totalmente sepultada por la tierra, incluida su iglesia, y que pese al riesgo que persiste en el lugar por la cantidad de agua que emana de la tierra y que amenaza con que "pueda caer el resto del cerro" un grupo numeroso de rescatistas tratará de empezar a trabajar en el terreno este jueves.
Por el momento, el gobierno no encontró ningún cadáver en esa comunidad de unos 400 habitantes, mientras que el alcalde de Atoyac de Álvarez, Ediberto Tabarez, dijo a la AFP que vecinos le reportaron desde La Pintada que se han recuperado 15 cadáveres y que otra sesentena de personas habrían quedado sepultadas bajo tierra.
Entretanto, la organización de defensa de los indígenas Tlachinollan alertó de que hay cientos de comunidades indígenas "incomunicadas y abandonadas" en las montañas de Guerrero, donde advierte que se han registrado graves accidentes y al menos una decena de personas habrían muerto por desprendimientos de cerros.
Todavía sobrepasado por las inusuales tormentas caídas desde el fin de semana, México se mantiene en alerta por Manuel, que se reactivó y este jueves golpeó como huracán en el estado de Sinaloa (noroeste). El fenómeno se debilitó poco después a tormenta tropical pero todavía avanza con vientos sostenidos de 100 km/h y rachas de 120 km/h y se pronostica que dejará lluvias intensas en el centro-oeste de México.
El aeropuerto internacional de Culiacán, capital de Sinaloa, fue cerrado temporalmente, las clases en la región fueron suspendidas y Protección Civil informó que unas 750 personas fueron evacuadas de los municipios Navolato, Culiacán y Angostura.
Según el SMN, en el Golfo de México otro ciclón podría surgir en las próximas horas cerca de las costas de los estados de Veracruz y Tamaulipas, donde el lunes impactó la tormenta Ingrid que después se fue disipando.