México. AFP La Presidencia de México salió ayer al paso de la polémica generada por la revelación de que la primera dama compró una mansión a una firma vinculada con el consorcio elegido para construir el primer tren de alta velocidad del país.
La controversia llega en medio de la peor crisis desde que Enrique Peña Nieto asumió la Presidencia en el 2012, originada por la desaparición y probable masacre de 43 estudiantes.
Eduardo Sánchez, vocero de Peña Nieto, descartó que tuvieran conocimiento de la revelación periodística sobre la mansión , que se difundió el sábado, y tampoco que influyera en la abrupta decisión posterior de revocar la concesión al consorcio , encabezado por una compañía china.
“El domingo no sabía de la noticia; me levanté con la noticia y a esa hora la señora iba volando hacia China”, dijo Sánchez a la cadena Televisa.
La primera dama, la exactriz de telenovelas Angélica Rivera, partió el domingo a China junto a Peña Nieto, quien asiste a las cumbres de APEC y G-20.
Mal momento. Este viaje ha estado rodeado de polémica porque ha sido considerado como una falta de sensibilidad, por opositores y familiares de los 43 estudiantes desaparecidos el 26 de setiembre en Iguala (sur).
Aunque detenidos han declarado que mataron a los jóvenes, los padres se aferran a la posibilidad de que continúen vivos y exigen al Gobierno reforzar la búsqueda mientras siguen las protestas multitudinarias.
Padres de los estudiantes posiblemente masacrados y sus compañeros retomaron ayer las protestas contra el Gobierno y bloquearon los ingresos al aeropuerto del turístico balneario de Acapulco (sur) , luego de un choque con la Policía que dejó una decena de lesionados.
Sánchez dijo a Televisa que el presidente está “verdaderamente dolido” por la tragedia, pero no podía perder la oportunidad de promover las inversiones durante su viaje a China y Australia.
El informe sobre la mansión es producto de una investigación del portal de noticias de la periodista mexicana Carmen Aristegui. El sitio señaló que la pareja presidencial había adquirido una lujosa casa en Ciudad de México valorada en siete millones de dólares y construida por Ingeniería Inmobiliaria del Centro, propiedad del Grupo Higa, que participa en el consorcio del tren.
Este consorcio, liderado por la compañía China Railway Construction Corporation (CRCC), obtuvo el 3 de noviembre la licitación para construir, por más de 3.700 millones de dólares, el primer tren de alta velocidad en América Latina que unirá Ciudad de México con la industrial Querétaro (centro).
Solo tres días después, de forma inesperada, Peña Nieto decidió revocar esta concesión tras cuestionamientos de la oposición sobre la transparencia del proceso de licitación, en el que ese consorcio fue el único postor.
Fue Rivera. La oficina de Peña Nieto reaccionó el domingo al informe periodístico, al recalcar que la vivienda fue adquirida exclusivamente por la primera dama en enero del 2012.
Rivera afrontó el costo con sus propios recursos, producto de la larga carrera que ha tenido como actriz, que le “ha permitido consolidar su patrimonio personal”, señaló Presidencia.
La Presidencia señaló que Rivera abonó el 30% del costo en la firma del contrato y después ha seguido cubriendo pagos.
La lujosa vivienda, que el sitio de Aristegui Noticias bautizó como la “Casa Blanca de Peña Nieto” y está registrada aún a nombre de Inmobiliaria del Centro, mide 1.400 metros, y tiene piso de mármol, piscina, biblioteca y un sistema de luces de colores.
El presidente vive en su residencia oficial de Los Pinos. Esta sería su vivienda privada y el reportaje no aclara si viola alguna ley al usar una casa registrada a nombre de terceros.