La Habana. AFP. Las FARC y el Gobierno colombiano dieron un nuevo paso hacia la paz al cerrar ayer un acuerdo sobre drogas, tercero de los seis puntos que están en discusión.
El anuncio se hizo en una declaración conjunta leída por el diplomático cubano Rodolfo Benítez, cuyo país es garante, junto con Noruega, de las conversaciones de paz, que empezaron en noviembre del 2012 en La Habana .
El diplomático noruego Dag Nylander agregó que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos va a convocar a una conferencia internacional contra el tráfico de drogas en el marco de la ONU.
“Acordamos la puesta en marcha de una nueva estrategia contra los activos involucrados en el narcotráfico y el lavado de activos que incluye la identificación de la cadena de valores del narcotráfico”, dijo Nylander.
Benítez destacó que será una campaña de erradicación de los cultivos de uso ilícito, y que en caso de que algunos campesinos insistan en cultivarlos se harán erradicaciones forzosas, pero de manera “manual” y no con productos químicos. Esta era una exigencia planteada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Colombia es, junto con Perú, el principal productor de cocaína en el mundo, con 309 toneladas y 64.000 hectáreas sembradas en el 2012, según la ONU.
El tema de drogas es el tercero de los seis puntos de la agenda de paz, después de que ambas partes consensuaron los dos primeros: reforma rural (mayo del 2013) y participación política (noviembre del 2013).
El jefe negociador del gobierno, Humberto de la Calle, declaró que “tanto el Gobierno como las FARC reconocen que el fenómeno del narcotráfico ha alimentado el conflicto en Colombia”.
Christian Voelkel, analista para Colombia del centro de análisis de conflictos International Crisis Group, consideró que este acuerdo fortalece el proceso de paz.
“Siempre puede pasar algo extraordinario, pero si no hay un choque externo extraordinario yo creo que estamos más allá del punto de quiebre, donde ni para las FARC ni para el gobierno hay marcha atrás”, consideró.