EscucharGuatemala (AFP). Casi 2.000 guatemaltecos han sido evacuados a causa de la erupción del volcán Pacaya, 50 km al sur de la capital, que este viernes hizo una segunda erupción de ceniza y lava, tras la ocurrida la noche del jueves con saldo de al menos un muerto y tres desaparecidos.
"El volcán Pacaya ha entrado en una nueva fase eruptiva similar a la del jueves, con explosiones y columnas de ceniza que alcanzan alturas hasta los 1.500 metros que se desplazan de sur a norte a 18 kilómetros por hora", señaló un comunicado de la Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred).
Con la nueva erupción se reanudó la caída de ceniza en los seis municipios más afectados hasta el momento, incluida la capital guatemalteca.
Asimismo, la Conred reporta que el número de evacuados se elevó de 1.700 a 1.910, de los cuales 1.783 se encuentran refugiados en albergues provisionales.
El ente gubernamental también ratificó el cierre del único aeropuerto internacional de la capital, La Aurora, hasta el sábado en la noche, debido a que "el espesor promedio de la capa de arena sobre la pista es de 2,5 centímetros".
La violenta erupción del jueves por la noche dejó un periodista muerto (víctima de piedras que le cayeron mientras cubría los hechos), tres niños desaparecidos, 59 heridos, 100 casas destruidas, casi 2.000 evacuados y un área de daños de 100 km2, según las diversas fuentes oficiales.
Además, un joven de 22 años murió al caer del tejado de una escuela cuando limpiaba ceniza del volcán, informaron cuerpos de socorro.
Con el cierre del aeropuerto capitalino, los vuelos son desviados a aeropuertos alternos como el Mundo Maya en Petén -unos 500 km al norte de la ciudad- o al de Comalapa, en El Salvador, según autoridades de Aeronáutica Civil.
La actividad del volcán se había incrementado la noche del miércoles con expulsión de lava, fumarolas y ceniza, y se agudizó el jueves por la noche durante unas cuatro horas.
Tras un periodo de calma este viernes, las violentas erupciones se reanudaron por la tarde.
El director del Instituto Nacional de Vulcanología (Insivumeh), Eddy Sánchez, dijo en rueda de prensa que "el Pacaya ha acumulado mucha energía por varios años y como "una olla de presión la libera violentamente".
Ante la magnitud de la erupción, el gobierno mantiene el estado de calamidad decretado el jueves por la noche en los departamentos de Guatemala (centro), Sacatepéquez (oeste) y Escuintla (sur).
Mientras tanto, los guatemaltecos en un radio de un centenar de km se armaban con escobas y palas para retirar de tejados y patios de sus viviendas arena y cenizas lanzadas por el volcán, constató la AFP.
"Sólo hemos limpiado el patio de la casa y ya llenamos una bolsa de basura grande", contó a la AFP Isabel Estévez, una ama de casa que junto a su esposo inició la limpieza de los sedimentos, que en algunos lugares alcanzan hasta 5 cm de espesor.
El ministerio de Educación suspendió las clases en los centros situados en los tres departamentos donde fue decretado el estado de calamidad, el cual permite designar recursos y fondos económicos sin licitar.
En la capital, los transeúntes se movilizaban por la calle como sobre una playa, debido a la espesa capa de arenas y cenizas, de la que prácticamente no se libraba ningún espacio.
El Pacaya ha mantenido una actividad constante durante 49 años en Guatemala, según registros del Instituto de Vulcanología, pero sólo en seis ocasiones ha dado muestras de gran poder.
La actividad de este bello volcán -de 2.552 metros de altura- no es la primera este año en Guatemala. El 26 de abril el volcán Santiaguito, 206 km al oeste de la capital, se reactivó y lanzó arena y ceniza.
En Guatemala hay unos 288 volcanes, de los cuales ocho han reportado actividad.
