París. AFP y EFE. El partido ultraderechista Frente Nacional buscará consolidar en la segunda vuelta de las elecciones municipales del próximo domingo en Francia el avance registrado en la primera ronda , con la posibilidad de arrebatar una decena de ciudades a los partidos tradicionales.
El récord de abstencionismo (38,7%) y el espectacular avance del FN de Marine Le Pen fueron una bofetada para el gobierno socialista del actual presidente François Hollande, pero también sonaron como una advertencia para la oposición de derecha clásica: ambos llamaron a los electores a movilizarse el domingo.
En la primera vuelta, el Frente Nacional encabezó el escrutinio en unas 19 ciudades y tiene la victoria casi asegurada en varias de ellas.
Según los datos comunicados por el Ministerio del Interior, las candidaturas de la derecha clásica obtuvieron a escala nacional el 46,54 % de los votos, cuando en 2008 se habían quedado en la segunda posición con el 44,4 %.
La derrota de la izquierda, que hasta ahora dominaba en las instituciones en todos los niveles de gobierno en Francia, queda ilustrada con el 37,74 % de los sufragios, siete puntos porcentuales menos que hace seis años.