Lisboa (AFP y EFE).
Los votos de la coalición conservadora en el Gobierno de Portugal permitieron este viernes que los presupuestos para el 2014 superaran la primera votación parlamentaria pese al rechazo en el bloque de la oposición y las protestas de los portugueses.
El documento –que recoge nuevos recortes del gasto público y mantiene la elevada presión fiscal para el próximo ejercicio– fue defendido por el Ejecutivo como la mejor vía para cerrar con éxito el programa de ajustes acordado con la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) como contrapartida por el rescate financiero.
El texto ha sido blanco de fuertes críticas entre las fuerzas de izquierda y también entre patronal y sindicatos.
Este viernes miles de personas se concentraron frente al Parlamento, en Lisboa, para expresar su desacuerdo con un Presupuesto que consideran empobrecedor para el país.
"Gobierno fuera de la ley", "El presupuesto es un robo" y "Basta de la troika" rezaban algunos mensajes de los manifestantes dirigidos contra el gobierno de coalición de centro derecha en el poder y contra la troika, que representa a los acreedores de Portugal.
El proyecto de presupuesto, cuya versión final será votada el 26 de noviembre, prevé 3.900 millones de euros en recortes e ingresos adicionales, un 2,3% del PIB.
Según el gobierno, el presupuesto permitirá a Portugal concluir en junio del 2014 el programa de austeridad y reformas concluido con la UE y el FMI en mayo del 2011, a cambio de un préstamo de 78.000 millones de euros.
Los funcionarios públicos son los principales perdedores de este presupuesto, que prevé reducciones sensibles de sus salarios y pensiones.