Praga
Ante las próximas elecciones legislativas y presidenciales, la República Checa creó un organismo para protegerse contra la desinformación, después de las supuestas campañas de Moscú para influir en la política de otros países.
El "Centro de lucha contra el terrorismo y amenazas híbridas (CTHH)" funciona desde principios de año, según el ministerio checo del Interior.
"Una de las funciones del centro es desenmascarar posibles ataques dirigidos contra las elecciones libres", destacó el ministro del Interior, Milan Chovanec.
Con unos 20 especialistas, el organismo se encarga, entre otras cosas, de analizar el nivel de riesgo para la seguridad nacional de las falsas informaciones, y de proponer medidas para contrarrestarlas.
Las próximas elecciones legislativas checas están previstas en octubre y las presidenciales en enero.
"Un Estado responsable debe reaccionar a las falsas informaciones, como a los ciberataques, cada vez más numerosos", advirtió por su parte el primer ministro checo, Bohuslav Sobotka.
"No podemos hacer como si no estuviéramos al corriente de los esfuerzos desplegados por un poder extranjero", dijo ante la prensa, evitando cuidadosamente citar un país.
El general checo Petr Pavel, jefe del Comité militar de la OTAN, afirmó recientemente en la conferencia "Stratcom Summit" en Praga, que la propaganda rusa busca "propagar el pánico y el miedo", con una "amplia gama de medios" al servicio de una "propaganda sofisticada contra los países miembros de la OTAN".
Esta semana, el general Pavel reiteró estas afirmaciones en Alemania, donde también se celebrarán este año elecciones legislativas.
Infiltración de medios. El informe anual del servicio de inteligencia checo BIS, publicado a finales de 2016, dio cuenta por su parte de varios intentos para "debilitar la fuerza de la información (de la República Checa) a través de la infiltración de medios y de internet y mediante la distribución masiva por el Estado ruso de propaganda y desinformación".
El riesgo de que la desinformación influya en unos comicios es "real", estima Jakub Janda, adjunto a la dirección del grupo de análisis "Valores europeos", interrogado por la AFP.
Existen unas 40 páginas web en checo, como www.skrytapravda.cz ("verdad escondida") o www.ac24.cz, que difunden informaciones "falsas o exageradas", cuya actividad puede ser a menudo atribuida a Rusia, según él.
De esta manera, políticos prooccidentales checos son "atacados" por estas webs, mientras que otros se ven "glorificados" por sus posicionamientos a favor del Kremlin, constata Janda.
"Es por esto que estas páginas apoyan al presidente Milos Zeman y los partidos de oposición de obediencia comunista o de extrema derecha", analiza.
Defensor de medidas antiinmigración, abiertamente prorruso y prochino, Zeman, elegido presidente a principios de 2013, ha criticado en múltiples ocasiones este nuevo centro antidesinformación, acusándolo de ser un "órgano de censura".
Según Janda, una gran parte de las informaciones divulgadas por estos sitios web están escritas por checos, muchos de ellos cercanos al antiguo régimen totalitario derrocado en 1989, y que hoy se sienten "frustrados" por pertenecer a un país con una estructura occidental.
Sus expertos fueron los primeros en descubrir que un video que dio la vuelta al mundo en el que supuestamente se veían a "migrantes islámicos" intentando violar a una mujer "en alguna parte de Europa" era en realidad una mujer de Praga agredida por sus compatriotas, vendedores de droga.