Berlín. AFP. Miles de globos luminosos sobrevolaron ayer el cielo de la capital alemana para conmemorar la caída del Muro de Berlín hace 25 años, el 9 de noviembre de 1989, un acontecimiento histórico que, para la jefa del Gobierno alemán, demuestra que “los sueños pueden hacerse realidad”.
Bajo la atenta mirada de cientos de [[BEGIN:INLINEREF LNCPGL20141109_0002]] miles de espectadores[[END:INLINEREF]], unos 7.000 globos se lanzaron a lo largo de 15 kilómetros del antiguo trazado del Muro con el cuarto movimiento de la Novena Sinfonía de Beethoven, basado en la Oda a la Alegría del escritor alemán Federico Schiller, de fondo.
Una marea humana acudió al centro de Berlí y bloqueó la circulación entre la puerta de Brandeburgo y Potsdamer Platz para presenciar este espectáculo, que cierra un fin de semana de festejos en la capital alemana.
En Checkpoint Charlie, uno de los pasos fronterizos más conocidos entre Berlín Este y Berlín Oeste, una muchedumbre compacta celebró también este acontecimiento, que puso fin a la Guerra Fría y anunció la reunificación de Alemania y de Europa .
“¡Somos un pueblo feliz!”, dijo el alcalde de Berlín, Klaus Wowereit, desde la puerta de Brandeburgo. A su lado, el último dirigente de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, recibió una ovación del público por su papel en la reunificación alemana.
Gorbachov compartió ovaciones con el exdirigente del sindicato polaco Solidarnosc, Lech Walesa, presente en la ceremonia.
Cielo iluminado. El lanzamiento de los 7.000 globos terminó en el puente de Bornholmer Strasse, en el norte de la ciudad, el primer punto de paso entre ambas partes de Berlín que se abrió la noche del 9 de noviembre de 1989 y por donde la actual jefa del Gobierno alemán, ángela Merkel , cruzó del Este al Oeste de Berlín a los 35 años de edad.
“La caída del Muro mostró que los sueños pueden hacerse realidad”, dijo ayer la canciller. “Podemos cambiar las cosas para bien. Ese es el mensaje dejado por cientos de miles de alemanes del Este, que bajaron a la calle para reclamar más libertad”, añadió.
Merkel, que vivió en la República Democrática de Alemania (RDA) antes de iniciar su carrera política tras la caída del Muro, consideró que este mensaje de esperanza se dirigía a los pueblos oprimidos ahora en “Ucrania, Siria, Irak y en todas partes, donde las libertades y los derechos humanos están amenazados”.
El papa Francisco instó también desde Roma a construir “puentes y no muros”.
Por su parte, Gorbachov se mostró más pesimista, al estimar que el mundo estaba “al borde de una nueva Guerra Fría”.
Ayer, durante la mañana, Ángela Merkel y otras autoridades alemanas clavaron rosas en los vestigios del Muro, en homenaje a los 138 alemanes muertos en esta barrera edificada en 1961.
A pesar de la fría y gris jornada, esta gran fiesta popular cumplió con todo su programa.