Berlín. AFP. Los jefes de la diplomacia alemana y estadounidense se reunirán mañana en Viena para intentar resolver la crisis que ha estallado entre ambos aliados después de que Berlín descubrió el caso de dos presuntos espías dobles que trabajaban para Washington.
“Queremos reactivar nuestra asociación, nuestra amistad con bases sinceras, estamos preparados. Ese también será el mensaje que transmitiré a mi homólogo estadounidense, John Kerry, cuando me reúna con él en Viena”, dijo el ministro alemán de Relaciones Exteriores Frank-Walter Steinmeier en una rueda de prensa.
“A pesar de los acontecimientos de las últimas semanas, que son preocupantes y que nos condujeron a la expulsión del jueves, nuestra alianza con Estados Unidos es para mi es indispensable”, manifestó el ministro.
El descubrimiento de dos presuntos espías pagados por Washington culmina varios meses de tensión diplomática entre Alemania y Estados Unidos relacionada con los métodos de espionaje del Gobierno estadounidense, que según las revelaciones del exconsultor Edward Snowden incluyeron la interceptación de las comunicaciones de la canciller Ángela Merkel.
El Gobierno alemán anunció el jueves la expulsión del jefe de los servicios secretos estadounidenses en Alemania , después del descubrimiento de estos dos presuntos espías, una decisión que resulta inusual entre aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte OTAN).
Los analistas coinciden en que la situación es “grave”, aunque es probable que ambas partes se esfuercen por preservar este vínculo de suma importancia, aún más en el contexto actual de numerosas crisis internacionales.
En Berlín, el tono era conciliador. Martin Schäfer, el portavoz de Steinmeier, rechazó el término de “escalada”. El vocero de Merkel, Steffen Seibert, afirmó que las tensiones no afectan a las negociaciones en curso sobre un tratado de libre intercambio entre Europa y Estados Unidos.
“No ha habido ninguna llamada de la canciller (Ángela Merkel) con Washington y no hay ninguna programada por el momento, pero ustedes saben que la canciller y el presidente estadounidense mantienen buenas relaciones”, apuntó el portavoz de la jefa de Gobierno alemán Ángela Merkel.
En Washington, el presidente Barack Obama se ha mantenido en silencio, pero la Casa Blanca subrayó el jueves la importancia de las relaciones con Alemania, absteniéndose a comentar los casos de espionaje ya sostienen atañen a la seguridad nacional.
La prensa alemana, que apoya al unísono a Merkel, adoptaba un tono menos diplomático.
“Este es un momento decisivo en la historia de las relaciones germano-estadounidense”, opinó el rotativo de centro-izquierda Süddeutsche Zeitung, en referencia a la expulsión del jefe de los servicios secretos de Estados Unidos. Se trata de “un acto de protesta sin precedentes contra la arrogancia de Estados Unidos”, añadió.
“Merkel no es el perro faldero de Obama. El mensaje que (Merkel) le envió era claro e indispensable”, consideró el rotativo Frankfurter Allgemeine Zeitung.
“La crisis actual es muy importante”, dijo Henning Riecke, experto de relaciones transatlánticas del Consejo Alemán de Política Exterior (DGAP).
“Los alemanes no entienden por qué Estados Unidos espían (a un aliado) para defender sus intereses”, dijo.