San Salvador
Un tribunal salvadoreño declaró culpable este jueves al sacerdote español Antonio Rodríguez por introducir en cárceles objetos ilícitos para pandilleros presos, pero su sentencia de dos años y medio de prisión fue sustituida por medidas alternativas.
"El juez emitió un veredicto condenatorio pero decidió, por ser una condena que no supera los tres años de cárcel, otorgarle la medida sustitutiva a la detención como lo establece la ley penal y será puesto en libertad con ciertas restricciones", explicó el fiscal Alvaro Rodríguez.
Precisó que el tribunal de la ciudad de Santa Ana (66 km al oeste de San Salvador) decretó medidas como no acercarse ni tener contacto con pandilleros y le prohibió el ingreso a cualquier cárcel del país.
Sin embargo, no le impuso una restricción migratoria, por lo que el religioso no tiene impedimentos para salir del país.
El sacerdote Rodríguez fue arrestado el 29 de julio por orden de la Fiscalía General de la República (FGR), que lo acusó ante la Justicia de introducir bienes ilícitos a prisiones donde estan recluidos pandilleros, aunque no se precisó qué tipo de bienes habría entregado.
El religioso apoyó durante un tiempo una tregua que desde el 2012 mantienen las violentas pandillas que actúan en El Salvador, pero luego se alejó del proceso por desacuerdos con sus mediadores, el exjefe guerrillero Raúl Mijango y el obispo castrense Fabio Colindres.
Tras conocer el resultado del proceso judicial en su contra, el sacerdote Rodríguez, conocido popularmente como padre Toño, dijo que planea regresar en el corto tiempo a España para tomar "un descanso" de por lo menos dos años.
El padre Toño es párroco en la ciudad de Mejicanos, 5 km al norte de San Salvador, cuyos feligreses reclamaron públicamente en varias ocasiones por la detención del sacerdote, quien durante varios años se dedicó a rehabilitar a pandilleros.