Tegucigalpa. El presidente de Honduras Carlos Roberto Reina abogó ayer por cerrar el oscuro episodio de los desaparecidos, pero pareció atenuar su postura en torno a los beneficios de una amnistía para los militares.
"En primer lugar, muchas personas han opinado a favor (de la amnistía para los militares) como el arzobispo (de Tegucigalpa monseñor Oscar Rodríguez), así como dirigentes muy importantes de los partidos", dijo el mandatario.
Sin embargo, indicó que "si alguien cometió delitos como un torturador, ese no es un delito político, tendría que ir a los tribunales de la república".
"Yo quiero ser en eso perfectamente claro, para que no queden dudas", insistió. Esta posición pareció modificar parcialmente una declaración del martes en la que Reina aseguró que una amnistía aprobada en 1991 favorece a los militares acusados por la represión desatada en la década de 1980. Reina enfrentó fuertes críticas de grupos estatales y privados de defensa de los derechos humanos que lo acusaron de de debilidad frente a las fuerzas armadas y alentar la impunidad militar.
Escuadrones de la muerte integrados por militares, adiestrados por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y asesores argentinos, secuestraron, torturaron y mataron a 184 desaparecidos, según el estatal Comisionado Nacional de Protección de los Derechos Humanos.
Las fuerzas armadas han advertido que no permitirán que oficiales sean utilizados como "chivo expiatorio" de las desapariciones, alegando que fueron producto de una política de Estado y que una amnistía extinguió su responsabilidad penal. El mandatario insistió en que el arzobispo de Tegucigala "que es una autoridad moral de primer orden, ha dicho, que tenemos que ir liquidando esa etapa. Son voces sensatas. Sólo se oponen ciertos activistas de los derechos humanos".
"¿Por qué la declaración de un ciudadano que ha sido defensor de los derechos humanos y que ha actuado con la suficiente integridad para que el pueblo hondureño se haya volcado el día de las urnas, va a tener miedo de opinar en este sentido?.
"¿Miedo a los activistas de los derechos humanos? En absoluto. Hablamos con laí! verdad. Pero hay una trama, casi al día siguiente y vienen noticias del extranjero usando la palabra (desafortunado)" para calificar el que el presidente haya expresado que la amnistía favorece a los militares. Reina dijo que su gobierno ha propuesto cerrar el episodio de las desapariciones planteando una solución de los aspectos jurídicos.
"Sí algunos los comprende la amnistía, quedan liquidados por la amnistía...Si hay otros, deben ir a responder ante los jueces", dijo.
Añadió que un segundo paso sería "encontrar los restos de los desaparecidos. Queremos que se encuentren, están apareciendo, y por último indemnizar a los familiares", dijo. El presidente aseguró que "yo he visto que hay una campañita para que eso de la amnistía se vuelva un delito mencionarla, o que el presidente actúa mal", al pronunciarse sobre el controversial tema.
El presidente del privado Comité para la Defensa de los Derechos Humanos (CODEH), Ramón Custodio, dijo que "debemos alegrarnos que el presidente no está enfermo de la soberbia del poder y es capaz de practicar humildemente el derecho de rectificar".
Sin embargo, el dirigente dijo que hay "indicios" de que se celebró una cumbre entre el presidente, los militares, políticos y el poder judicial para acordar favorecer a oficiales con la amnistía.
"Parece que tiene visos de realidad que la tal reunión cumbre se realizó...Cuando la tengamos verificada, vamos a informar", dijo.