París. AP y EFE. Corea del Norte sufrió ayer graves cortes en el servicio de Internet, al grado de que un experto informático dijo que el sistema de acceso en línea estaba “totalmente caído”.
La Casa Blanca y el Departamento de Estado se negaron a comentar si el Gobierno de Estados Unidos era responsable.
El presidente Barack Obama dijo el viernes que el Gobierno esperaba una respuesta al ataque informático a Sony Pictures Entertainment, al que llamó un “acto de vandalismo cibernético” y del que responsabilizó al régimen de Pionyang.
Obama no informó cómo podría responder su país y se desconocía de momento si los problemas de acceso a Internet eran la represalia. Washington da a las operaciones de ataque cibernético un carácter de alta confidencialidad.
“No vamos a dar detalles de las opciones de respuesta ni vamos a comentar esa clase de informes, excepto para decir que en la medida que pongamos en marcha nuestra respuesta, unas medidas se verán y otras no”, dijo la vocera del Departamento de Estado, Marie Harf.
Corea del Norte negó en varias ocasiones ser responsable del ataque cibernético a Sony.
Doug Madory, director de análisis de Internet en la firma Dyn Research, que estudia la conectividad en la red, afirmó que los problemas se descubrieron durante el fin de semana.
Además, dijo que una posible explicación al problema es que un enrutador presentara una falla, aunque tampoco se descarta que se hubiera lanzado un ataque al servicio en línea del país.
“La inestabilidad de los enrutadores no es infrecuente, pero esta suspensión en particular ha durado horas y empeora, en lugar de mejorar”, indicó Madory.
Denuncia. Tal problema se conoció poco antes de que el secretario general adjunto de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Ivan Simonovic, manifestó ayer que los abusos sistemáticos del régimen norcoreano incluyen crímenes contra la humanidad, y pidió al Consejo de Seguridad que actúe para proteger a la población de ese país.
Simonovic presentó algunas de las claves de la investigación publicada este año por expertos de las Naciones Unidas sobre la situación en Corea del Norte, que ayer fue analizada por primera vez en el máximo órgano de decisión de la organización.
“En muchos casos, constituyen crímenes contra la humanidad”, dijo Simonovic, que recordó que existen evidencias de asesinatos, esclavitud y torturas.