Tras una breve interrupción, la dirección internet en Suiza del portal (
“Dos horas después de la desactivación (de esta dirección por parte del proveedor estadounidense de dominios EveryDNS.net) hemos logrado un montón de servidores DNS (sistemas de nombres de dominio) disponibles”, anunció el Partido de los Piratas de Suiza, que apoya a WikiLeaks en nombre de la libertad en Internet.
Además, a las 16:30 GMT de ayer se constataron cientos de sitios web “espejos” de WikiLeaks. Esta es una práctica en Internet consistente en que, cuando los internautas detectan una censura, “se forma una comunidad espontánea y todo el mundo se pone a replicar por todos los sitios”, explicó Grégoru Frabre, ingeniero de sistemas informáticos.
Desde que comenzó a publicar los telegramas, WikiLeaks está sufriendo ataques informáticos masivos que han dificultado su acceso.
Algunas notas eran muy críticas con el Jefe del Estado afgano, al que se describe como “débil” y parte de un régimen corrupto.
Pese a que los cables diplomáticas han causado revuelos en todo el mundo, el país más molesto por su difusión sigue siendo Estados Unidos.
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, reconoció ayer que deberá seguir durante “semanas” contactando con dirigentes extranjeros molestos por las filtraciones para calmarlos.
Paralelamente, continuaban los intentos de Washington por limitar el acceso a WikiLeaks. El Ejército anunció haber advertido a sus soldados en contra de la consulta de los documentos publicados por ese portal.
La Casa Blanca también ordenó a los organismos estadounidenses tomar medidas para que sus funcionarios no puedan tener más acceso al portal desde los ordenadores profesionales, salvo con autorización especial.