“Este canal de comunicación queda suspendido, diferido hasta que no haya un mensaje claro de cuál es la relación que quiere EE. UU. con Venezuela”, aseguró el canciller, añadiendo que “no tiene sentido perder el tiempo”.
“Ojalá haya una rectificación y cese la injerencia en los asuntos internos”, dijo Jaua, que matizó que “todas las relaciones diplomáticas y consulares se mantienen al nivel en que estaban”.
Jaua reiteró el rechazo de Caracas a las declaraciones de la subsecretaria adjunta para América Latina, Roberta Jacobson, en las que pidió que las elecciones presidenciales del 14 de abril sean “abiertas, justas y transparentes”.
En enero, el hoy presidente interino de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que el gobierno, a finales de 2012, contactó a EE. UU., con la autorización del fallecido Hugo Chávez, a través de su embajador en la Organización de Estados Americanos (OEA), Roy Chaderton.
Ambos países, sin embajadores desde 2010, han tenido choques desde el 5 de marzo, horas antes de la muerte de Chávez. Maduro expulsó a dos funcionarios de la embajada de EE. UU. en Caracas por un supuesto complot .