“Si en el pasado eran las llamadas potencias, es decir los Estados, los que querían condicionar la elección del papa, hoy se trata de involucrar a la opinión pública”, se lamentó en un inusual comunicado la Secretaría de Estado.
“A través de los siglos, los cardenales han tenido que hacer frente a múltiples presiones a la hora de elegir pontífice por parte de diferentes poderes, afrontando lógicas de tipo político y mundano”, dice la nota de la institución vaticana que preside el cardenal Tarcisio Bertone.
En la actualidad, “se intenta alterar a la opinión pública mediante argumentos y valoraciones que no recogen el sentir espiritual que la Iglesia está viviendo”, sostiene el documento del Vaticano.
“Es deplorable que al aproximarse del inicio del Cónclave (...) se multiplique la divulgación de noticias no verificadas ni verificables e inclusive falsas que causan grave daño a personas e instituciones”, recalca el comunicado.
Radio Vaticano afirmó que hay quienes se aprovechan de la renuncia del papa Benedicto XVI para desprestigiar a la Iglesia.
Mientras tanto los preparativos continúan en la Plaza San Pedro, donde hoy Joseph Ratzinger efectuará su último ángelus. Las autoridades tienen previsto que será un evento que convocará a gran cantidad de fieles y peregrinos.
Benedicto XVI dará su bendición y hará una reflexión dominical para todos los congregados.