“A raíz de este nuevo diálogo de la Iglesia y Cuba y las medidas que se están tomando”, la UE decidió darse un “tiempo razonable para juzgar cuáles son los resultados de estos esfuerzos”, dijo el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, tras una reunión con sus colegas europeos en Luxemburgo.
Los 27 países del bloque tenían previsto efectuar ayer su revisión anual de la
La Iglesia Católica cobró en las últimas semanas un protagonismo sin precedentes en más de medio siglo de revolución cubana, al facilitar mediante el diálogo la liberación de un preso político enfermo y el traslado de otros doce a cárceles próximas a sus domicilios.
El aplazamiento de la revisión de la
Moratinos aseguró que la postergación promoverá el éxito del diálogo, hasta el punto que se mostró convencido de que en setiembre la UE “superará la
Aun así, el optimismo de Moratinos contrasta con la frialdad con la que Francia calificó los progresos que, según España, se están produciendo en la Isla.
“Francia reitera su insistente llamado a las autoridades cubanas para que liberen a todos los presos de opinión y conciencia”, declaró una portavoz de la Cancillería francesa, al estimar que la liberación el sábado del preso Ariel Sigler Amaya, parapléjico, era una “decisión humanitaria que se imponía”.