Kabul. AFP y AP. Los rebeldes talibanes lanzaron ayer un ataque con carro bomba y cohetes contra una base militar de la OTAN en Jalalabad, en el este de Afganistán, el mismo día que el Senado de EE. UU. confirmó al general David Petraeus como comandante de las fuerzas estadounidenses en ese país del centro de Asia.
“Un ataque contra la base militar de Jalalabad se produjo esta mañana”, declaró ayer el capitán de corbeta Iain Baxter, un portavoz de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán.
“Varios atacantes fueron muertos. Utilizaron un carro bomba, RPG (lanzacohetes) y armas livianas. Hicieron estallar el carro bomba, pero no alcanzaron el perímetro” de seguridad de la base, destacó el capitán de corbeta.
Dos miembros de las fuerzas de seguridad resultaron heridos, anunció el comandante de la OTAN sin precisar su nacionalidad. El ataque comenzó en la madrugada y duró varias horas.
Un portavoz regular de los talibanes, Zabihulá Mujahed, reivindicó el ataque por teléfono.
La base de Jalalabad –una base y un aeropuerto militares– es una de las más importantes de la OTAN en el país, después de la de Kandahar (sur) y de Bagram, en los suburbios de Kabul.
Por otra parte, ayer el Senado de EE. UU. ratificó de forma unánime la designación del general David Petraeus como comandante de las fuerzas de ese país en Afganistán.
Petraeus reemplaza al general Stanley McChrystal, un militar cuya carrera de 30 años finalizó en desgracia debido a declaraciones que hizo a una revista acerca de personalidades del Gobierno.
Petraeus fue elogiado efusivamente tanto por demócratas como por republicanos, pese a los desacuerdos entre ambos partidos respecto a la política estadounidense hacia Afganistán.