Nueva York. AFP. Menos de 24 horas después de su inesperada victoria en un bastión republicano por un escaño vacante en la Cámara de Representantes, el Partido Demócrata logró ayer que el Senado rechazara una propuesta republicana para recortar el programa de salud Medicare como medida para controlar el déficit presupuestario.
Los demócratas estaban exultantes ayer por el escaño en el Congreso que se interpreta como una reacción adversa a la estrategia republicana de pedir recortes de beneficios sociales para controlar el déficit de Estados Unidos.
La batalla en el distrito 26 Norte de Nueva York fue para cubrir el puesto habitualmente ocupado por el Partido Republicano que quedó vacante por la salida de Chris Lee, quien renunció por un escándalo de infidelidad conyugal.
Como el resto de su partido, la republicana Jane Corwin hizo campaña en el distrito a favor reformas drásticas a Medicare, programa financiado con impuestos que proporciona atención sanitaria a las personas mayores. Su oponente, la demócrata Kathy Hochul, hizo la campaña opuesta, y ganó.
Las ondas de la elección especial se convirtieron en olas en Washington, donde ahora los demócratas ya ven a los republicanos vulnerables con sus planes para Medicare en las elecciones legislativas y presidenciales del 2012.
Ayer el Senado rechazó el plan republicano de recortes a Medicare por 57 votos a 40, incluidos cinco republicanos que abandonaron a su partido al votar en contra del plan.
Los republicanos plantearon hace un mes convertir Medicare en un programa subvencionado por el mercado de seguros privados. El partido confiaba en que los problemas fiscales del país justificaban cortes a los beneficios sociales.