Al Qaida en la Península Arábiga (AQPA) también afirmó que el sangriento asalto contra el consulado estadounidense en Libia había sido motivado, además de por esta película realizada en Estados Unidos, por la muerte del número dos del movimiento, Abu Yahya al Libi, quien murió en junio en un ataque estadounidense en Pakistán.
Ante estos ataques repetidos en contra de sus intereses, Estados Unidos empezó a desplegar fuerzas en la región. El secretario de Defensa, Leon Panetta, subrayó que su país debía “estar preparado en la hipótesis de que estas manifestaciones” se conviertan en incontrolables.
Washington anunció el envío de cien marines a Libia, donde el embajador Chris Stevens murió el martes junto a otros tres altos funcionarios, y a Yemen, donde murieron cuatro manifestantes el jueves.
La película de baja calidad cinematográfica Innoncence of Muslims, que representa a los musulmanes y al profeta Mahoma como inmorales y brutales, provocó protestas el martes contra la representaciones estadounidenses en Egipto y en Libia que se extendieron a otro países.