Dubái. AFP. Las protestas que sacuden al mundo árabe desde las insurrecciones de Túnez y Egipto llegaron a Libia y agudizaban ayer las tensiones en el reino de Bahréin y en Yemen.
En Yemen, dos personas murieron por disparos de la Policía en Adén y al menos otros dos sufrieron heridas de bala en una movilización en esta ciudad del sur cuando fuerzas antimotines dispersaron a centenares de jóvenes que se habían agrupado en una plaza.
Los manifestantes tomaron luego por asalto la sede de la Municipalidad de Mansura, uno de los barrios de Adén, e incendiaron cuatro vehículos. Las fuerzas de seguridad dispararon para dispersar a la turba, que respondió lanzando piedras a los policías.
Por otra parte, en Libia, 38 personas resultaron heridas en la noche del martes en enfrentamientos en Benghazi (norte), entre manifestantes y fuerzas de seguridad, informó el director del Hospital Al Jala de esa ciudad.
Las fuerzas de seguridad intervinieron, según el diario libio Quryna , para poner fin a enfrentamientos entre partidarios del gobernante libio, Muamar Gadafi (en el poder hace 42 años), y “saboteadores”, que formaban parte de los manifestantes reunidos para pedir la libertad de un abogado que representa a familias de prisioneros muertos en 1996 en un tiroteo en la prisión Abu Salim en Trípoli.
El abogado Fethi Tarbel estuvo detenido brevemente, según el periódico, “por haber propagado un rumor que decía que se había incendiado la cárcel”.
Pese a que Tarbel fue liberado, los manifestantes y “personas con armas blancas” se dirigieron al centro de Benghazi e “incendiaron y dañaron automóviles e intentaron deteriorar bienes públicos, bloquearon las calles y lanzaron piedras”, afirmó el diario.
Como efecto de esas protestas, hoy en Libia se convocó a un “día de la ira”, según llamados lanzados desde la red social Facebook.
Mientras, ayer las autoridades liberaron a 110 islamistas del Grupo Islámico de Combate Libio (GICL), lo que suma un total de más de 360 “prisioneros políticos” liberados desde marzo por Trípoli.
La agitación de la jornada también llegó a Bahréin donde, pese a la prohibición del Gobierno, miles de personas reclamaron cambios al régimen durante las exequias en Manama de un estudiante que la Policía mató en otra protesta
Más de 2.000 personas participaron en los funerales de Fadel Salman Matruk, quien falleció a inicios de esta semana.
El ministro de Interior, jeque Rashed ben Abdalah Al Jalifa, presentó ayer disculpas por la muerte y anunció el arresto de dos acusados en las filas de las fuerzas de seguridad por la muerte.