Quito DPA Un sismo de 7,2 grados en la escala de Richter se sintió ayer en gran parte del territorio de Ecuador y solo su profundidad, de 235 kilómetros, impidió que se registraran daños graves y víctimas mortales, según el Instituto de Geofísica y la Secretaría Nacional de Riesgos.
Apenas ocurrido el sismo, el Instituto indicó que era de 6,9 grados en la escala de Richter, pero posteriormente se afinó la cifra del evento, que tuvo su epicentro en la región amazónica de Pastaza, a 154 kilómetros al sureste de Quito, y ocurrió a las 06:54 hora local.
La información fue corroborada por la organización homóloga de Estados Unidos.
Se registraron tres réplicas, que fueron sentidas en diferentes magnitudes por la población con un total de 40 segundos de duración entre todas. De todas formas, el Instituto Geofísico precisó que el movimiento telúrico tuvo, en realidad, 10 minutos de duración, según los aparatos de medición.
La Secretaría Nacional de Riesgos apuntó que el sismo es “uno de los mayores registrados en Ecuador en los últimos años” y señaló que de ser menos profundo, habría causado numerosos daños “ya que su magnitud fue similar al del terremoto de Haití, de 7,1 grados”.
El Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) coincidió con el servicio similar de Estados Unidos en descartar un tsunami .
El portavoz de la Cruz Roja Ecuatoriana, Jorge Arteaga, dijo que en el puerto pesquero de Manta (suroeste) una persona sufrió politraumatismos tras derrumbarse un muro.
“Hasta ahora es la única víctima", agregó Arteaga, al indicar que el temblor también dejó daños en el puerto de Guayaquil, donde dos edificios sufrieron agrietamientos en sus paredes.