Buenos Aires. (AFP). La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, anunció el envío al Congreso de un proyecto de ley para "democratizar" el Poder Judicial, en un acto la noche del lunes en la Casa de Gobierno.
"Estamos enviando el proyecto de ley relativo a la democratización de la Justicia", indicó la mandataria y agregó que la reforma dará "mayor legitimidad al más importante de los tres poderes porque es el que revisa los actos de los poderes Legislativo y Ejecutivo".
El proyecto contempla seis puntos fundamentales, entre ellos, la elección por votación popular de los integrantes del Consejo de la Magistratura, el órgano encargado de confeccionar las ternas de candidatos al Poder Judicial de los jueces, para que luego sean designados por el Poder Ejecutivo con acuerdo del Senado.
En el acto no participaron legisladores de la oposición, que habían sido invitados oficialmente, en señal de rechazo a la iniciativa.
"La presidenta busca la kirchnerización de la Justicia", consideró Alfredo Atanasof, diputado por el Frente Peronista (peronismo opositor), en un comunicado.
Para el legislador, el proyecto "es inconstitucional" e insistió en que "es un avasallamiento sin precedentes contra uno de los principales poderes del Estado".
El Consejo de la Magistratura, cuyos miembros se ampliarían de 13 a 19, cumple un papel clave en la destitución de magistrados, ya que es el encargado de abrir el juicio político y actúa como acusador ante el Jurado de Enjuiciamiento.
Otros puntos del proyecto son la obligación de la publicidad de los actos del Poder Judicial, la creación de tres cámaras de Casación y la regulación de la aplicación de las medidas cautelares.
También la publicidad y acceso directo a la declaración jurada de los funcionarios de los tres poderes del Estado.
El gobierno estaría en condiciones de aprobar la reforma con sus votos y el de sus aliados.
Otro legislador que sumó sus críticas fue Pablo Tonelli, de Propuesta Republicana (PRO, derecha), quien aseguró que "la presidenta quiere controlar a la Justicia y a los jueces" con este proyecto.
"En otros términos, es evidente que la presidenta sabe que el último límite a sus aspiraciones hegemónicas es la Justicia y ha decidido remover el obstáculo", dijo el diputado.