“Ai Weiwei es sospechoso de crímenes económicos”, declaró el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hong Lei. Agregó que “otros países no tienen derecho a interferir” en este caso, que “no tiene nada que ver con derechos humanos o libertad de expresión”.
La Policía china abrió una investigación sobre el artista, indicó la agencia Nueva China, mientras su familia espera noticias con angustia tres días después de su detención en el aeropuerto de Pekín.
Nacido en 1957, Ai Weiwei se ha enfrentado con frecuencia con el poder, al que ha criticado fuertemente; incluso ha calificado a los dirigentes chinos de gángsteres , o ha salido en defensa de causas humanitarias en los últimos años.
El domingo fue detenido en el aeropuerto de Pekín y llevado a un lugar desconocido.
La información de la agencia oficial no fue confirmada por Lu Qing, esposa de Ai Weiwei.