La resolución, aprobada por entre 15.000 y 20.000 personas, según medios locales, reunidas en el estadio de Santa Cruz (centro) reclama al ejecutivo del presidente Evo Morales que respete "la voluntad popular expresada en las urnas" por los ciudadanos, según el documento enviado a la AFP por la gobernación regional.
El acuerdo contempla poner en marcha una iniciativa "para recolectar firmas para realizar un referéndum nacional vinculante" que obligue a la Asamblea Legislativa acatar la voluntad electoral de los bolivianos.
Con esta medida, el comité cívico de Santa Cruz, la región más próspera de Bolivia y opositora a Morales, espera evitar la destitución de Rubén Costas, gobernador desde 2006 por voto popular, y anular las normas que utilizan jueces y fiscales para enjuiciar y destituir a miembros de la oposición.
La Asamblea Legislativa de la región de Santa Cruz analiza el pedido de un juez, a solicitud del poder Ejecutivo, de destituir a Costas bajo la acusación de malversar $1,4 millones para organizar en el 2008 una consulta popular para dotarse de un modelo de gobierno administrativo autónomo del gobierno central.
El poder central dijo entonces que ese referendo buscaba separar de Bolivia a Santa Cruz.
La celebración del referéndum dependerá de si se recogen las firmas exigidas por la ley para llamar a este tipo de consultas populares.