Vehicles sit in flood waters at a auto repair shop, N.C., Saturday, Aug. 27, 2011 as Hurricane Irene hits the North Carolina coast. Hurricane Irene knocked out power and piers in North Carolina, clobbered Virginia with wind and churned up the coast Saturday to confront cities more accustomed to snowstorms than tropical storms. (AP Photo/Chuck Burton) (Chuck Burton)
Sus ráfagas seguían avanzando hacia al noreste de Estados Unidos donde millones de personas evacúan zonas de riesgo.
Entre los fallecidos, hay dos muertos en Carolina del Norte, un niño en Virginia. Además, un conductor murió cuando un árbol se fue encima de su automóvil en Virginia y un surfista se ahogó en Florida entre el fuerte oleaje.
El ojo de Irene tocó tierra en las costas de Carolina del Norte a las 8 a.m. locales (6 a.m. en Costa Rica) con vientos máximos sostenidos de 140 km/h y se desplazaba hacia el noreste a una velocidad de 24 km, indicó el reporte del Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami.
El ciclón causó dejó a unas 877.00 de personas sin electricidad en zonas costeras y unas 12.000 líneas de teléfonos se quedaron sin servicio en los estados de Carolina del Norte y Virginia.
Residentes en zonas alejadas del mar también sentían el impacto del ciclón que atraviesa el Atlántico estadounidense, una de las zonas más pobladas del mundo con unos 65 millones de habitantes.
El presidente de Estados Unidos Barack Obama se mantenía al frente de las operaciones de emergencia en Washington, reunido con responsables del Centro Nacional de Coordinación de Emergencias.
“Más de un millón de personas” fueron evacuadas de las costas de Nueva Jersey, al noreste de Estados Unidos, ante la amenaza, informó el gobernador Chris Christie.
Varias aerolíneas internas y extranjeras anularon o retrasaron unos 10.000 vuelos a la costa este de EE. UU., medida que afectó las terminales JFK, La Guardia y Newark en Nueva York y también Miami.
“Me voy a quedar, voy a dormir aquí. Mucho viento, mucha agua. Es todo”, afirmó Harry Poulakakos mientras verificaba cómo se colocan piezas de madera para proteger su café-restaurante situado en un edificio histórico cerca de Wall Street en el sur de Manhattan, una zona de evacuación obligatoria.
Desde Carolina del Norte hasta Massachusetts, las autoridades decretaron el estado de emergencia.
Las principales rutas que conducen a Nueva York cerrarán si los vientos sobrepasan los 96 km/h. Unos 900 guardias nacionales y 2.500 electricistas están listos a intervenir si hay cortes de energía.
El Ejército dispone de 101.000 miembros de la Guardia Nacional para afrontar la emergencia.
Irene tiene un diámetro de 820 km, el equivalente a casi un tercio del total de la costa este estadounidense de 2.675 km, estima la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA).