El canciller panameño Fernando Núñez Fábrega, y el nicaragüense Samuel Santos se estrecharon la mano en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York.
Los altos funcionarios llegaron a un acuerdo este miércoles para que expertos revisen una solicitud de Nicaragua ante la ONU para expandir su plataforma marítima continental, sin que esa aspiración afecte las aguas territoriales panameñas, según comunicó la cancillería de Panamá a la agencia AFP.
Esta iniciativa podría afectar la informal alianza entre Costa Rica, Colombia y Panamá en contra de las pretensiones del gobierno de Nicaragua en el mar Caribe.
Con el acuerdo nicaragüense-panameño se podría pensar que ese frente se debilita al perder a uno de sus intengrantes, pero, según expertos, los panameños se mantienen como aliados de los ticos frente a las intenciones nicaragüenses.
El especialista en relaciones internacionales, Carlos Murillo, considera que el entendimiento entre las dos naciones no afecta en nada a los intereses costarricenses.
"No afecta en nada porque Costa Rica decidió judicializar el proceso (de isla Calero) al enviarlo a la Corte Internacional de Justicia y los límites marítimos con Nicaragua no existen porque no se han negociado, por lo tanto Nicaragua no puede decir que determinada parte del Mar Caribe, que eventualmente puede ser costarricense, es nicaragüense", explicó Murillo.
Constantino Urcuyo, experto en temas internacionales, cree que el pacto entre el gobierno nicaragüense y el panameño no significa que Panamá abandone a Costa Rica porque hay relaciones muy estrechas entre los dos pueblos. "No significa que nos abandone a nosotros porque tenemos relaciones más fuertes", señaló Urcuyo.
Carlos Murillo comparte la misma idea. Murillo indica que Costa Rica, Colombia y Panamá son aliados políticos frente a una política expansionista de Nicaragua, aunque cada Estado tiene una posición particular. "La situación de cada país es totalmente diferente", concluyó.
Según Urcuyo la convergencia de intereses de las tres naciones no es una alianza formal, es solo una convergencia.
"Sin comentarios. Eso es algo de ellos", así respondió el canciller de Costa Rica, Enrique Castillo, sobre el pacto entre Nicaragua y Panamá. "Para nosotros no cambia nada, las cosas siguen igual", puntualizó Castillo.