En un documento emitido ayer, los firmantes del Pacto por México detallaron que durante las reuniones celebradas el fin de semana decidieron “blindar los procesos electorales y los comicios” que se celebrarán el 7 de julio próximo en 14 de los 32 estados del país.
La decisión llega después de que el 17 de abril el Partido Acción Nacional (PAN, conservador) difundió videos y grabaciones en los que aparecían funcionarios del estado de Veracruz, gobernado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) –del mandatario Enrique Peña Nieto–, ofreciendo ayudas sociales a cambio de promesas de voto.
El escándalo abrió una crisis política entre el gobierno de Peña Nieto y los principales partidos de la oposición, que amenazaron con salirse del Pacto por México, firmado el 2 de diciembre pasado para impulsar las reformas clave del país, si las componendas continúan.
El fin de semana, representantes del PRI, PAN, del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Gobierno firmaron un documento con 18 puntos.
Los signatarios del Pacto propondrán “a los gobernadores y alcaldes” un acuerdo que los comprometa a no realizar entregas de apoyos gubernamentales en los 45 días previos a las elecciones.
El PAN pidió la destitución de la ministra de Desarrollo Social, Rosario Robles, por los hechos detectados en Veracruz, algo que hasta el momento rechaza Peña Nieto.