La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, calificó de preocupante la política de Francia hacia los gitanos, el desmantelamiento de sus campamentos y las deportaciones hacia sus países de origen.
Por otra parte, después de acusar la semana pasada a Francia de cometer una especie de holocausto racial al expulsar del país a miles de gitanos, el líder cubano se preguntó en un artículo publicado ayer si el presidente Sarkozy se está volviendo loco.
Estas reacciones surgen luego de conocerse la existencia de una circular emitida por el Ministerio francés del Interior que ordena que 300 campamentos o asentamientos ilegales deberán ser evacuados en los próximos tres meses, prioritariamente los de gitanos.
Unos 8.300 gitanos fueron expulsados desde enero del 2010.
Por su parte, el ministro francés de Inmigración, Eric Besson, negó la existencia de un plan específico contra los gitanos.
“No conocía esta circular”, afirmó ayer Besson al canal de televisión público France 2, interrogado sobre la orden emitida por el ministerio que dirige Brice Hortefeux, incondicional de Sarkozy.
Horas después, Hortefeux firmó una nueva circular para deshacer los malentendidos sobre un eventual estigma de los gitanos, anunciaron sus servicios. Esta pide que prosigan las evacuaciones de campamentos ilícitos quienesquiera que sean sus ocupantes.
El secretario de Estado francés para Asuntos Europeos, Pierre Lellouche, rechazó en Bruselas las críticas contra Francia y acusó a la Comisión Europea de no preocuparse por los gitanos.