“Si los traidores del régimen fantoche de Corea del Sur participan directamente en las pretendidas ‘sanciones’ de las Naciones Unidas, se tomarán severas represalias físicas”, advirtió el Comité Norcoreano para la Reunificación Pacífica de la Patria en un comunicado difundido por la agencia de prensa oficial KCNA.
Norcorea anunció el jueves su intención de efectuar un nuevo ensayo nuclear en una fecha todavía por concretar, que supondría un desafío a Estados Unidos, su “peor enemigo”, y una respuesta a las sanciones que la ONU votó el martes tras el lanzamiento en diciembre de un cohete considerado por EE. UU. como un misil balístico.
“Esas sanciones son una declaración de guerra contra nosotros”, estimó el comité norcoreano.
Por su parte, Jay Carney, vocero de la Casa Blanca, dijo que “la declaración de Corea del Norte es una provocación innecesaria”, y agregó que una nueva prueba nuclear sería una violación significativa de las sanciones de la ONU.
Ayer, EUA y China lograron un altísimo consenso; tras una serie de entrevistas en Pekín, ambas partes estiman que un ensayo sería preocupante. China “no vacilará” en reducir su ayuda a Norcorea si realiza el ensayo, apuntó el periódico chino oficialista Global Times.