Ciudad de Guatemala
El jefe de policía del municipio de Salcajá, en el oeste de Guatemala, fue asesinado por un grupo de narcotraficantes que lo secuestró la semana pasada, en un ataque en el que también se masacró a ocho agentes policiales, informó este viernes el presidente guatemalteco, Otto Pérez.
"Expreso mis condolencias a la familia del subinspector César García, secuestrado y asesinado por este grupo criminal", dijo el gobernante durante la inauguración de una academia de la Policía Nacional Civil en el departamento de Santa Rosa (sur).
La noche del jueves 13 de junio, un comando armado asesinó a balazos a ocho agentes y secuestró a García, jefe policial del municipio de Salcajá, en una acción que las autoridades atribuyen a narcotraficantes que operan en esa región.
Pérez señaló que el hecho "no quedará en la impunidad" y aseguró que los responsables "serán castigados" y "llevados a la cárcel", aunque no aportó detalles de la investigación ni confirmó si los restos humanos localizados en un río después del crimen corresponden a García.
En los últimos días, fueron encontradas partes de un cuerpo y un uniforme negro que utiliza la Policía guatemalteca en un río del departamento de Huehuetenango (oeste), fronterizo con México.
Sin embargo, peritos forenses e investigadores de la Fiscalía que indagan el crimen declararon el caso en reserva y aún no han confirmado a quién pertenecen los restos.
El Ejecutivo decretó tres días de duelo a nivel nacional por la matanza de los policías, que conmocionó a la población y despertó la preocupación de diversos sectores sociales que consideran la acción como una muestra del poder del crimen organizado en el país.
Guatemala vive una ola de violencia que deja más de 6.000 muertos cada año, uno de los índices más altos de Latinoamérica.
Las autoridades estiman que cerca del 50% de las muertes violentas en Guatemala están asociadas a la actividad del narcotráfico y a la lucha entre pandillas o "maras".