Ramiro Ortíz, subprocurador general de Justicia duranguense, dijo que entre los asesinados figura el dueño del centro de rehabilitación, Roberto Mayoral, quien según informaron testigos era el objetivo principal de los atacantes. Estos no fueron identificados.
Los cadáveres fueron localizados en diversas áreas del centro como el patio, el gimnasio y algunas de las habitaciones, según se informó.
Al momento del tiroteo, en el centro había unos 49 internos, muchos de los cuales lograron escapar cuando escucharon los primeros disparos.
Los heridos fueron trasladados a diversos hospitales, informaron medios locales.
Otras dos personas murieron en tiroteos en dos incidentes separados en el mismo estado.
Un hombre apareció asesinado afuera de un centro comercial, mientras que otro cadáver se encontró en el cruce de dos calles en el centro de la ciudad de Durango, dijo la Subprocuraduría de Justicia estatal.