"Hasta el momento el personal de servicios periciales hizo el levantamiento de 21 hombres, en su mayoría jóvenes de entre 25 y 30 años de edad", dijo a la AFP Jesús Montejano, fiscal del estado de Michoacán, del que Morelia es capital.
Los cuerpos fueron arrojados de manera simultánea, en algunos casos en grupos, en diversos puntos de la ciudad de 600.000 habitantes, a 305 km de la Ciudad de México, incluyendo una cancha de fútbol y la parte trasera de un hotel.
En todos los casos junto a los cadáveres aparecieron letreros en los que se les relacionaba con robos, secuestros y violaciones, señaló Montejano. Esos mensajes son una táctica frecuentemente usada por narcotraficantes para desprestigiar a sus víctimas.
En un primer caso, una denuncia reportó que había cinco cadáveres apilados en el sector de Puerto de Buenavista. La policía fue alertada poco después de la presencia de otros cinco cuerpos en la salida a Salamanca, también colocados unos sobre otros y con la cara cubierta con cinta adhesiva.
En una cancha de fútbol fueron descubiertos tres cuerpos abandonados de la misma forma y tres más detrás de un hotel. Otros cinco cadáveres fueron hallados en distintos lugares de Morelia.
Michoacán es bastión de La Familia, considerado uno de los cárteles más sangrientos y cuyos líderes se dicen inspirados por una mezcla de mensajes bíblicos y consignas de autoayuda.
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