Roma. EFE Luca Ronconi, considerado uno de los innovadores del teatro contemporáneo tanto italiano como europeo, murió el sábado anterior a los 81 años víctima de una pulmonía.
Nacido en Túnez el 8 de marzo de 1933, Ronconi es considerado uno de los más grandes directores teatrales del país, maestro de generaciones de actores y colaborador de figuras como Claudio Abbado o Riccardo Mutti.
Se licenció en la Academia Nacional de Arte Dramático de la capital italiana a los 20 años, un hecho con el que cumplió uno de sus pasiones y sueños de la infancia: dedicarse al teatro.
Pronto destacó al situarse a la vanguardia de las corrientes teatrales y dirigió templos como el Teatro Stabile de Turín (1989-1994), el Teatro de Roma (1994-1998) o el Piccolo de Milán, que aún regía desde 1999.
Allí formó pareja artística con Sergio Escobar en el papel de director artístico y debutó con La vida es sueño de Pedro Calderón de la Barca
Trabajó en producciones de Luigi Squarzina, Orazio Costa y Michelangelo Antonioni.
Entre sus producciones se incluyen óperas como Carmen (1970), Das Rheingold (1979), Nabucco (1977), Il Trovatore (1977), Macbeth (1980), La Traviata (1982), Aida (1985) o L'incoronazione di Poppea (2000) .
Ronconi era doctor honoris causa por las universidades de Bolonia, Perugia, Urbino y Venecia. En el 2012 recibió en la Bienal de Teatro el León de Oro por su dilatada trayectoria.
Las reacciones no se hicieron esperar y el primer ministro de Italia, Matteo Renzi, expresó su pésame al calificar a Ronconi como “un gran visionario que ha sabido profundizar en el alma humana y representarlo” .
“(Fue) un gran protagonista de la vida cultural y civil del país. Un compromiso visionario que ha sabido profundizar en el alma humana y representarla en escena con fuerza”, dijo en declaraciones recogidas por los medios.
Por su parte, el ministro de Cultura italiano, Dario Franceschini, calificó al director en su perfil de Twitter como “un grande del teatro durante más de cincuenta años que ha innovado con coraje y pasión”.