A Sánchez, detenido hace una semana, se le decretó auto de formal prisión como probable responsable en la comisión de los delitos de delincuencia organizada, colaboración con el narcotráfico y lavado de dinero, reportó la institución en su página electrónica.
La Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía federal del país) acusa al candidato, exalcalde de Cancún (que pertenece a Quintana Roo), de proteger las actividades de los carteles de la droga de los Beltrán Leyva y Los Zetas en ese turístico balneario.
Según la Procuraduría, los ingresos regulares de Sánchez rondaban los $1,5 millones pero hay registro de que retiró en bancos hasta $2,4 millones, lo que las autoridades suponen son retribuciones por informar o facilitar operaciones del narcotráfico.
Tras su detención, la PGR informó que Sánchez fue notificado de las acusaciones en su contra y que tuvo tiempo para justificar sus ingresos, pero al final no lo hizo y por ello se solicitó su detención.
El procesamiento motiva que se suspendan los derechos políticos de Sánchez, por lo que no podrá presentarse a las elecciones del 4 de julio, señaló el texto.
Sánchez es el candidato de una coalición del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido del Trabajo y Convergencia.
El PRD denunció que las acusaciones son una invención y su presidente nacional, Jesús Ortega, aseguró ayer que impugnará la decisión judicial y se mostró confiado en que Sánchez pueda presentarse finalmente a los comicios.
En 15 de 32 estados mexicanos se celebrarán elecciones el 4 de julio, que será un “termómetro” para la elección presidencial de 2012.