París. AFP. Las familias de las víctimas de la caída del vuelo Río-París, en junio del 2009, y el poderoso sindicato francés de pilotos aéreos expresaron ayer su cólera tras revelarse que una recomendación desfavorable para la empresa Airbus se retiró del último informe sobre la investigación del hecho.
Para la asociación Ayuda y Solidaridad AF447, que representa a las familias de las 228 víctimas del vuelo de Air France, la investigación que hizo la Oficina de Investigaciones y Análisis (BEA) está “totalmente desacreditada”.
“Este triste episodio desacredita definitivamente la investigación técnica y genera una crisis de confianza sin precedentes con las autoridades de la investigación”, declaró Robert Soulas, presidente de la Asociación.
“La precipitación con que las autoridades acusaron a los pilotos sin ninguna reflexión previa había despertado ya nuestras sospechas”, agregó Soulas.
“Ahora tenemos confirmación de que las afirmaciones que emanan de la BEA fueron no solo prematuras, sino carentes de objetividad, parciales y orientadas a defender a Airbus”, añadió.
Por su lado, el Sindicato Francés de Pilotos de Línea (SNPL) exigió explicaciones sobre esas “graves revelaciones que afectan seriamente” su confianza en la BEA y pidió a su propio investigador salirse de la investigacion de la BEA.
El último informe de la BEA, publicado el viernes, reveló una serie de fallas de los pilotos del Airbus A330 de Air France.
Según los diarios Les Echos y La Tribune , el texto fue limpiado de párrafos que cuestionan el funcionamiento erróneo de una alarma clave en los aviones A330 y además fue retirada la recomendación hecha para remediar el problema.