EscucharAcapulco
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Un retén de policías impide el acceso al sitio donde peritos forenses rescatan del interior de una fosa clandestina los restos de varios cuerpos de personas, el jueves 22 de agosto. Se intentaba confirmar si los restos correspondían a 12 jóvenes secuestrados a la salida de un bar de la Ciudad de México, el pasado 26 de mayo. (EFE)
Los cadáveres de 12 personas fueron hallados en dos fosas clandestinas en la turística ciudad mexicana de Taxco (sur), cercana a la región de Tierra Caliente, donde fuerzas federales operan para frenar el fuego entre milicias y narcotraficantes, informó el lunes una fuente oficial.
Elementos del ejército mexicano iniciaron "las investigaciones periciales y ministeriales en torno al hallazgo de 12 cuerpos sepultados en fosas clandestinas", dijo Iñaki Blanco, fiscal del estado de Guerrero, al que pertenece Taxco.
Las dos fosas fueron encontradas entre los poblados de Mezcaltepec y Puente Campuzano, que forman parte de Taxco y donde en junio de 2010 fueron extraídos 55 cadáveres de un entierro clandestino junto a una mina.
Peritos en antropología, fotografía y criminalística de la fiscalía estatal se trasladaron el domingo al lugar del hallazgo para realizar la exhumación de la docena de cuerpos, cuyas identidades aún no se determinan, añadió el fiscal.
Las autoridades dijeron que este lunes continuarán los trabajos de exploración del terreno ante la posibilidad de que haya más restos humanos.
Guerrero, entidad en la que se encuentra el balneario de Acapulco, comparte con su vecino Michoacán (oeste) la convulsa región de Tierra Caliente, donde desde hace un año surgieron las milicias llamadas autodefensas argumentando combatir el cartel local Los Caballeros Templarios.
Al menos otros 63 cuerpos fueron hallados entre noviembre y diciembre pasado en otras fosas clandestinas en el estado de Jalisco (oeste), en una zona limítrofe con Michoacán, en el contexto de la lucha que libran a sangre y fuego Los Caballeros Templarios con sus acérrimos enemigos del cártel Jalisco Nueva Generación.
Milicianos de Michoacán -que se dicen hartos de los secuestros, extorsiones y asesinatos que los narcotraficantes perpetran contra la población-, ingresaron el fin de semana, armados y encapuchados, a la ciudad de Apatzingán, bastión de Los Caballeros Templarios, donde fueron custodiados por fuerzas federales.
