La ley electoral prohibió desde ayer al mediodía cualquier mensaje de propaganda, informó el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
A partir de esa hora, además, quedaron prohibidas las encuestas durante 48 horas y además se inició la ley seca en el país que restringe la venta de licor dos días.
Los principales candidatos a la presidencia, Otto Pérez Molina, del Partido Patriota (PP) y Manuel Baldizón, de Libertad Democrática Renovada (Líder), dieron ayer sus discursos finales de campaña en los departamentos de Jutiapa y Petén, respectivamente.
“Estoy listo para ganar en la primera vuelta”, dijo Pérez Molina, un general retirado del Ejército, a cientos de seguidores en Asunción Mita (Jutiapa).
Por su lado, Baldizón también reiteró su promesa de aplicar la pena de muerte y dar un bono extra a todos los trabajadores si llega a la presidencia.
Pérez, según las encuestas, es favorito para ganar las elecciones, pero las encuestas indican que quizás le falten los votos para evitar una segunda vuelta electoral, que el TSE ha programado para el 6 de noviembre entre los dos aspirantes más votados.
Los sondeos le dan a Pérez Molina una intención de voto del 46% al 48% superando por más de 30 puntos al segundo lugar, Baldizón, con intenciones que oscilan entre el 18% y el 22%.
El académico Eduardo Suger, de Compromiso, Renovación y Orden (Creo), que está en tercer lugar con una intención de voto del 11,5%, también llamó ayer a los guatemaltecos acudir a las urnas y votar por una opción diferente.
La ex primera dama de Guatemala Sandra Torres, cuya candidatura presidencial fue vetada por prohibición constitucional, aprovechó también para recordar a los seguidores de la coalición oficial integrada por la Unidad Nacional de la Esperanza y Gran Alianza Nacional que voten por sus candidatos al Congreso y alcaldías. Su salida de la contienda allanó el panorama a Pérez Molina, ya que Torres tampoco ha cedido su apoyo a otro candidato. La Premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú, candidata del Frente Amplio de Izquierda, que tiene escasas posibilidades de triunfo según las encuestas, concluyó su campaña en el departamento occidental de Chimaltenango.
En forma paralela, 86 observadores que envió la Organización de Estados Americanos (OEA) comenzaron su desplazamiento hacia el interior del país para verificar el desarrollo de los comicios.
El TSE ha convocado a más de 7,3 millones de guatemaltecos empadronados a acudir a las urnas mañana en un intento por superar el 60% de asistencia que se registró en las elecciones generales del año 2007. Los ciudadanos tienen que elegir un presidente, vicepresidente, 158 diputados al Congreso, 20 al Parlamento Centroamericano y 333 corporaciones municipales.
El candidato presidencial que resulte electo sustituirá en el poder a Colom el 14 de enero del 2012, por un periodo de cuatro años.
Según el Tribunal Electoral, más de 31.700 candidatos se inscribieron para estos comicios en distintos puestos de elección popular, pero, del total, solo 639 son mujeres en una contienda en que participan 15 partidos políticos.