Francia aseguró el sábado que sus soldados permanecerían en Malí "el tiempo necesario para que el terrorismo sea vencido", mientras que Londres y Washington, se mostraron decididos a luchar contra las acciones de Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI), pero excluyeron enviar tropas a la región.
Dos mil soldados franceses ya se encuentran desplegados sobre el terreno, una cifra que alcanzará y podría superar los 2.500 hombres, según París.
El sábado, la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) pidió a la ONU que provea "inmediatamente apoyo logístico y financiero para el despliegue de la MISMA" (Misión Internacional de Apoyo a Malí), tras una cumbre extraordinaria celebrada en Abiyán.
Berlín, que ya anunció el envío de dos aviones de transporte, reaccionó hoy con la promesa de una ayuda financiera adicional a los países africanos que participan en la operación militar en Malí durante la reunión de donantes que se celebrará el 29 de enero en Adís Abeba.
Por su parte, la comunidad internacional pidió a los Estados miembros de la CEDEAO que proporcionen lo más rápido posible las tropas prometidas a la fuerza militar que recibió el mandato de la ONU para ayudar a Malí a recuperar el control del norte del país, ocupado desde hace más de nueves meses por grupos islamistas.
Unos 2.000 miembros de la MISMA serán desplegados hasta el 26 de enero, pero solo un centenar de soldados habían llegado ya a Bamako.
Ocho países de África Occidental (Nigeria, Togo, Benín, Senegal, Níger, Guinea, Ghana y Burkina Faso) y Chad anunciaron su contribución a la MISMA, que estará integrada por unos 5.800 soldados para tomar el relevo de Francia.