Markala, mali. AFP. Los soldados franceses, que efectúan sus primeras operaciones terrestres en Mali, se enfrentaban ayer de lleno en Diabali (oeste) a los combatientes islamistas vinculados con al-Qaeda.
“Las fuerzas especiales francesas están actualmente en Diabali” luchando “cuerpo a cuerpo contra los islamistas. El Ejército maliense está igualmente en la región”, expresó una fuente de seguridad de Mali, versión que confirmó un informante de seguridad regional.
Diabali, a 400 km al norte de la capital, Bamako, fue tomada el lunes por los islamistas, presuntamente dirigidos por el argelino Abú Zeid, uno de los jefes de al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
La localidad fue bombardeada varias veces por la aviación francesa, pero los islamistas no se fueron completamente de ella y, según varios testimonios, intentan mezclarse con la población y utilizarla como escudo.
En esta zona “tenemos a los grupos más duros, a los más fanáticos, los mejor organizados, los más determinados”, según el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian. “Son varios centenares, más de un millar, 1.200 o 1.300, de terroristas en la zona, que posiblemente recibirán refuerzos”.
Más de 800 soldados franceses han sido ya desplegados en Mali y próximamente habrá unos 2.500.
La intervención francesa en el país africano recibió ayer el reconocimiento de la canciller alemana, Angela Merkel,quien estimó que “el terrorismo en Mali” es “una amenaza para Europa”.
Por tierra. En Mali, la ofensiva hacia el norte de los soldados franceses constituye una nueva etapa en la intervención francesa, después de los bombardeos aéreos efectuados a partir del viernes pasado en el centro y norte del país para detener el avance de los islamistas hacia la capital, Bamako.
“Hasta ahora, había algunas fuerzas terrestres en Bamako para aportar seguridad a nuestros ciudadanos (franceses), a los ciudadanos europeos y a la capital. Ahora, las tropas francesas están subiendo hacia el norte”, declaró el ministro francés de Defensa.
“¿Qué hacer con los terroristas? Destruirlos. ¿Hacerlos prisioneros? Si es posible...”, declaró el martes el presidente francés, François Hollande , en Dubái.
No obstante, Hollande afirmó que Francia “no tiene la intención de quedarse en Mali”, y que una fuerza occidental africana de unos 3.300 hombres tomará el relevo de las tropas francesas.