Lille, Francia. AFP. La Justicia francesa mantuvo ayer la acusación de proxenetismo contra el exdirector del Fondo Monetario Internacional Dominique Strauss-Kahn en el llamado caso del hotel Carlton de Lille, una ciudad en el norte de Francia, anunciaron sus defensores.
El tribunal de apelación de Douai desestimó el recurso de nulidad del procedimiento presentado por los abogados del político.
“Dominique Strauss-Kahn toma nota de la decisión y va a presentar un recurso de casación”, indicó la defensa del exjerarca del Fondo en un comunicado.
Los abogados del también exministro de Finanzas francés pedían la anulación del procedimiento que hubiera liquidado la última acusación contra su cliente.
La decisión de la Justicia francesa de mantener el caso abierto llega diez días luego de que Strauss-Kahn alcanzara un acuerdo financiero con la empleada de un hotel neoyorquino que lo acusó de agresión sexual en mayo del 2011.
La Fiscalía de Manhattan había abandonado los cargos penales contra el exministro por este caso desde agosto del 2011.
Sin embargo, el 26 de marzo de 2012, Strauss-Kahn fue inculpado en Francia por “proxenetismo agravado con banda organizada” por haber participado en fiestas sexuales que incluyeron prostitutas.
Strauss-Kahn asegura que desconocía que las mujeres participantes en las fiestas a las cuales asistió fueran prostitutas y explicó que se las presentó un comisario de Policía y un empresario.
“La defensa de Dominique Strauss Kahn tiene la certeza de que quedará limpio de las acusaciones absurdas de proxenetismo de que es objeto, acusaciones contrarias tanto al sentido común como al análisis judicial”, argumentaron los abogados.
Reproches. Los defensores del exdirector del Fondo pusieron en duda la imparcialidad de los jueces de instrucción, a los que reprochan no haber dado a conocer todos los documentos del expediente.
En octubre anterior, la Fiscalía de Lille cerró, “por ausencia de infracción”, el expediente de las acusaciones de violación hechas en contra del político europeo en el marco del caso del hotel Carlton.
Dominique Strauss-Kahn, de 63 años de edad, era considerado el político mejor situado para ser el candidato de la izquierda a la elección presidencial francesa, celebradas en mayo pasado, cuando las acusaciones de agresión sexual hechas por una empleada de hotel llevaron a su detención en Nueva York el 14 de mayo de 2011.
El escándalo lo obligó a dimitir de su puesto de jefe del Fondo Monetario Internacional y puso punto final a su carrera política.