París. AFP. El candidato socialista a la presidencia francesa François Hollande, ignorado por los dirigentes europeos, recibió ayer el apoyo del primer ministro belga y de exmiembros de gobiernos de derecha de su rival Nicolás Sarkozy y de Jacques Chirac, a días de la primera vuelta electoral.
El jefe del gobierno belga, el socialista Elio di Rupo, asistió ayer a un gran mitin de campaña de Hollande en Lille. Di Rupo no habló en el acto, pero sí lo hizo Thierry Giet, su sucesor como dirigente del PS belga.
Se trata del primer apoyo a Hollande de un mandatario europeo en funciones, lo que no es de sorprender dado que la mayoría de ellos son conservadores.
Tanto el británico David Cameron como la alemana Ángela Merkel manifestaron públicamente su apoyo a Sarkozy, candidato a su reelección , y las informaciones sobre un supuesto acuerdo entre ellos para no recibir a Hollande hizo correr ríos de tinta en la prensa francesa al inicio de la campaña.
Hollande, que sigue siendo el favorito de los sondeos, recibió asimismo el respaldo de exmiembros de gobiernos de la derecha.
Corinne Lepage, exministra de Ambiente del presidente Jacques Chirac, anunció ayer que votará por él. “Siempre dije que no quiero que Sarkozy sea reelecto. Es importante que haya un polo realista, más allá de la izquierda, que apoye a Hollande”, explicó.
La víspera fue Martin Hirsch, ex alto comisionado para la Solidaridad y uno de los símbolos de la apertura del gobierno de Sarkozy, quien anunció a su vez que votará por Hollande.
Y, según declaró a la prensa el historiador Jean-Luc Barré, allegado de Chirac, el propio expresidente conservador votará por el candidato socialista y contra su propio campo.