Estrasburgo, Francia. AFP La Eurocámara condenó firmemente hoy los violentos incidentes ocurridos durante el desmantelamiento, el 8 de noviembre de un campo de saharauis cerca de El Aaiún por parte de las fuerzas marroquíes y se mostró favorable a una investigación a cargo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Los eurodiputados expresan su profunda preocupación frente al claro deterioro de la situación en el Sahara Occidental y condenan firmemente los violentos incidentes registrados en el campo de Gdim Izik, al sur de la capital, El Aaiún”, indicaron en una resolución.
El desmantelamiento del campo, donde se habían instalado unos 15.000 saharauis para protestar contra sus condiciones de vida, se saldó, según Rabat (Marruecos), con 13 muertos, 11 de ellos de las fuerzas del orden marroquíes.
El Frente Polisario, que lucha por la independencia del Sahara Occidental, estimó el número de muertos en decenas.
“La ONU constituiría la organización más apta para llevar a cabo una investigación internacional independiente con vista a clarificar los incidentes, las muertes y las desapariciones”, defendieron los eurodiputados, reunidos en sesión plenaria en Estrasburgo (Francia).
El Frente Polisario ha acusado a Francia, que mantiene estrechas relaciones con Marruecos, de haber impedido la apertura de una investigación por parte del Consejo de Seguridad de la ONU.
Por otra parte, la Eurocámara lamentó las afrentas contra la libertad de prensa y de información a las que han sido expuestos muchos periodistas europeos en el Sahara Occidental, una excolonia española anexada en 1975 por Marruecos.
También se mostró preocupada frente a la detención y las denuncias de acoso formuladas por defensores saharauis de los derechos humanos por parte de las fuerzas marroquíes.
Durante un debate que precedió a la votación, varios legisladores europeos se mostraron muy críticos con Marruecos.
“Es verdad que la violencia vino de muchos lados, pero poner al mismo nivel a quienes se defienden de una agresión con quienes les reprimen, persiguen y torturan, me parece del todo injustificable”, cargó ayer el ecologista español Raúl Romeva.
En cambio, el liberal belga Frederique Ries estimó que “no hay culpables de un lado e inocentes del otro. Hay responsabilidades, desiguales, quizás, pero se aplican a ambas partes de este conflicto que ha durado más de treinta años”, agregó.
Varios eurodiputados de izquierda se mostraron indignados por la visita que realizó la semana pasada a Bruselas el jefe de la diplomacia marroquí, Taieb Fasi Fihri, para presentar aclaraciones a los grupos políticos del Europarlamento en relación con los incidentes del 8 de noviembre.
“Habría que decir al Reino de Marruecos que éste no es su Parlamento. Este tiene una soberanía que se basa en la ciudadanía europea y es inaceptable la intromisión permanente de la administración de Rabat en esta institución”, denunció otro legislador español, Willy Meyer, de Izquierda Unida.